PENNAC,
D. Mal de escuela. Ed. Mondadori.
Barcelona. 2008
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“La presencia de mis alumnos depende
estrechamente de la mía: de mi presencia en la clase entera y en cada individuo
en particular”.
Dice Pennac (2008) que la presencia del profesor va
estrechamente ligada al del alumno, a la presencia del aula entera, en cada
individuo en particular no solamente físicamente, sino intelectual y mentalmente,
también es hacer presente la materia que quieres dar. Cuando el profesor está
en clase con todos los sentidos puestos en el aquí y ahora, habita la clase
plenamente, está con los alumnos, con sus exámenes y no está en otra parte, ni
pensando en nada más, esto es perceptible para los alumnos y los hace
presentes, mirados, atendidos, en conclusión, les hace saber que ellos existen
apara él. Sino “lo que digo no se encarna, flotan a la deriva y tienes la
sensación de perder la clase” (Pennac, D., 2008).
En
educación, ¿el docente sólo se ciñe a enseñar?; y el mal estudiante, ¿es
responsable exclusivo del fracaso escolar?
Pennac
(2008) pone mucho énfasis en el porvenir. La escuela, los profesores, padres y
alumnos tenemos la “mente saturada por el porvenir”, olvidando ¿de qué está
hecho mi presente? El porvenir es una extraña amenaza, que nos aleja de lo que
realmente importa, lo qué da sentido a la educación y enseñanza, que es tan
sencillo como que el alumno se sienta querido (fortalecer la construcción de
una autoimagen, autoestima, autonomía, etc.) para aprender, tener la mente
relajada para construir des del sentido nuevas conceptos y conocimientos con la
nueva información. El presente da sentido, nos conecta. El ser humano tiene una
necesidad de afecto “un ogro escolar”, que si no se tiene devora el corazón” (Pennac,
D., 2008), reforzando las ganas de huir, de sentimiento de vergüenza, de
indignidad y soledad que el “mal estudiante” padece. Cualquier estudiante
espera del profesor una mirada digna que le de alas para vivir con pasión, a
sentirse merecedores de atención y logros, a que los desengañe de sus miedos y
les de la confianza que se merecen. “Un presente de indicativo lleno de
oportunidad” (Pennac, D.,2008). Por tanto, el
profesor se convierte también en un investigador que quiere descubrir como
conectar al estudiante al momento presente y a todo su potencial para
desarrollarlo. El mal estudiante, no lo hace adrede. El profesor debe
comprender esto y no actuar como si fuera una provocación, sino que está tan
conectado a su papel de “mal estudiante” que cumple la profecía (profecía autocumplida),
es el adulto el que debe brindarle un puente a una nueva oportunidad y
conectarlo al saber “presente”.
Según el
MEC, se habla de fracaso escolar cuando “un
alumno no consigue los objetivos propuestos para su nivel y edad y existe un
desaprovechamiento real de sus recursos intelectuales”.
El fracaso escolar tiene “co- responsabilidades”
tanto en los éxitos como en los fracasos. Con la frase “existe un
desaprovechamiento real” me quedo. Significa tanto para mí. Estoy de acuerdo que
el fracaso escolar es un desaprovechamiento real, no sólo de los recursos
intelectuales no, ya que estos para mí son daños colaterales, sino también de
todos los recursos, tanto materiales, personales, profesionales, pedagógicos, etc.
Que la comunidad educativa, des de la base hasta el Sistema Educativo
plenamente dicho, ministerio con su legislación, etc. poseen. Pennac (2008) refuerza
la idea de la responsabilidad del fracaso escolar como patata caliente que
nadie asume y sobre la ella se construye una gran mentira; los “malos
estudiantes” “son la
encarnación del propio fracaso profesional, fracaso de otros profesores, papel
del colegio, padres, recursos que tengo o no tengo, horarios abusivos, etc. Y “nos
pasamos la patata caliente, y es que las sociedades también se edifican sobre
la mentira compartida” (Pennac, D.,2008). El
fracaso es colectivo.
Por mucho
que se pretendan integrar nuevas metodologías, más participativas, el peso de
la tradición tiene para rato. La “culpa”, ¿de quién es?, pues el Sistema
Educativo parece estructurado para que cada cual elija la suya.
El sistema educativo está estructurado para que
cada cual haga lo suyo sin pensar en la continuidad del proceso educativo y en
la globalidad contextual. Y a veces, faltan llegar a consensos a largo plazo
sobre a dónde queremos llegar, qué queremos conseguir, cómo lo vamos a
realizar, de qué disponemos... Más bien, se va tirando de prueba, ensayo- error
cada 4 años (o cambio de gobierno). Se pone un poco de lo que los padres
quieren y pasamos unas pruebas para verificar que en el cole se enseñe algo. Y
se va haciendo. Después llegan todas las dudas y malestares; Cada ciclo dentro
del sistema educativo se pregunta que han hecho en el anterior. ¿En infantil no
les enseñan ya a leer? ¿Pero qué hacen hoy en día en primaria? Y la patata caliente
se va rulando. El Ministerio de Educación apunta al fracaso familiar, a la poca
conciliación familiar, a los horarios parentales, etc. Las familias piensan que
los colegios no son lo que eran. También debemos contar con los procesos
internos de toda institución, los nuevos miembros y los antiguos, hasta los “republicanos
y los demócratas” (Pennac ,2008). La culpa, es no dejar “pensar y tomar decisiones
educativas” a un grupo de expertos en educación (hacer las investigaciones
pertinentes- análisis de las necesidades educativas, recursos disponibles. –
qué metodologías, ventajas-desventaja- Reflexión de programas, planificaciones,
objetivos, etc.) Y dejar el sistema educativo en manos de los gobernantes de
turno. También hay otro error, contar como expertos a los padres de turno. La
culpa es dejar el antojo, la moda, o la caspa o el cómo siempre (los extremos),
es decir, el miedo al cambio o el miedo a lo que no cambia gobernar. El
consenso, la responsabilidad y el conocimiento en educación pensado como
proceso a lo largo de la vida, es fundamental. Pero hay que dejar hacer a los
expertos. Voy a acabar con una frase que me dice siempre mi padre: ¿verdad que
no vamos al médico o al arquitecto a decirles lo que ellos han estudiado,
automedicarte o hacer un edificio? -pues me parece que todo el mundo sabe y
opina sobre educación.
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